jueves, 22 de mayo de 2014

APOYO

APOYO
La creación de un Museo de la ciudad.

Pienso que es necesaria la creación de un museo en nuestra localidad. Apoyo la creación del mismo en base a las siguientes razones:

Una de ellas sería el inmenso patrimonio cultural e histórico de Zafra. Dado que nuestra ciudad dispone de una producción arquitectónica, escultórica y artística en general de diferentes épocas y que se encuentra conservado en buen estado, en términos generales, la creación de un museo podría reunir muchas obras en un mismo espacio y gracias a ello, su conservación, restauración y exposición al público sería mucho mejor que ahora que están dispersas y en algunos casos, simplemente guardadas.

También influiría en el prestigio cultural de la ciudad y fomentaría el aumento del número de visitantes. Por ejemplo, la localidad de Olivenza recibió un gran número de visitantes el año pasado en su museo etnográfico y siguen en aumento este año. 

Creo que también se fomentaría una gran serie de actos y actividades relacionadas con el museo y el mundo de la cultura: conferencias, exposiciones, debates, etc. Además se facilitaría que las familias de Zafra que disponen de obras particulares pudiesen donarlas o exponerlas contribuyendo así al engrandecimiento de dicho museo.


Aumentaría la preocupación por la conservación del patrimonio entre la población y el respeto por los edificios y obras históricas existentes. En ocasiones el hecho de crear un museo en una localidad contribuye a que sus habitantes se preocupen mucho más por todos los edificios históricos de la localidad.

Daría la oportunidad de generar empleos específicos: director de museo, restauradores, conservadores, intelectuales dedicados a su estudio, ..., así como negocios de venta de recuerdos y souvenirs del museo y sus obras contribuyendo al desarrollo económico de Zafra. 

Mejoraría el conocimiento de toda la población de aquellas obras que "tienen" en su ciudad. Muchas veces buscamos fuera lo que tenemos en nuestra localidad, y damos mucha más importancia a obras que están lejos y que, en realidad, no tienen más valor artístico o histórico que las que podría haber aquí, en el museo.

Finalmente, no solo apoyo la creación de un museo, sino que opino que una localización ideal para el mismo sería el Alcazar de Zafra, cuyo futuro como Parador no está muy claro, y sería el lugar ideal donde exponer las obras y montar talleres de conservación, restauración, una biblioteca histórica, etc.

Parador de Zafra


miércoles, 21 de mayo de 2014

ANALIZO

Analizo
La fachada principal del Alcázar de Zafra.

Construido entre 1437  y 1443 por Lorenzo Suárez de Figueroa, primer conde de Zafra, lo primero que observo es que no es como otros castillos que eran fortalezas inexpugnables situadas sobre montañas rocosas, sino que parece una lujosa vivienda, que al parecer era su objetivo final.

La fachada principal es una enorme muralla levantada con pizarra y ladrillo. Se divisan cuatro torreones (veinticuatro metros de altura), dos de ellos situados en las esquinas y dos flanqueando la puerta de entrada.  La puerta termina en arco de medio punto en piedra y, sobre ella, hay una lápida que contiene los escudos de las cinco hojas de higuera y los leones de brazo alado en posición rampante de Doña María Manuel, así como la inscripción grabada en la misma piedra de quién lo mandó construir y el año de finalización de 1443.

A más altura sobre la puerta hay una ventana germinada con una columna de mármol blanco en el medio, y bajo esta, en granito, se leen los nombres “Figueroa” y “Manuel”. Finalmente, en la parte alta sobre la entrada hay una especie de balcón de piedra.

Las murallas están coronadas de almenas terminadas en pirámides, al igual que los cuatro torreones. Según he averiguado, a finales del Siglo XVI, se decidió reformar el Alcázar tanto en el exterior como en su interior. Esto se aprecia a simple vista por los añadidos que ocultan la estructura exterior de la fachada, y consisten en dos estructuras prismáticas rectangulares con entradas laterales a la puerta principal, y ventanas cuadradas enrejadas. Los añadidos, con terrazas superiores,  están terminados en balconeras  y están lucidos en color amarillo, por lo que se nota que no tienen nada que ver con el resto de la estructura en cuanto a su estilo.

La obra original sería de estilo gótico con influencias árabes (parece que intervinieron en su construcción maestros canteros árabes), mientras que los añadidos, al igual que el patio interior tienen un claro estilo renacentista (sería el propio Juan de Herrera, arquitecto del Escorial, quien habría diseñado las reformas)
En conclusión, es una construcción impresionante, tanto por sus muros almenados, como por sus torreones, especialmente la torre del homenaje situada en la parte oriental del Alcázar, e incluso los añadidos posteriores renacentistas resultan elegantes, especialmente su patio interior, el cual me ha gustado desde pequeña.

Actualmente allí se encuentra “El Parador Nacional de Turismo de Zafra”, aunque debido a la situación económica actual, su futuro como parador nacional resulta incierto.


Fachada occidental del Palacio.

Otra vista del Palacio.

COMPARO

COMPARO
Portada del Hospital de Santiago/Portada de la iglesia de la Candelaria

Información:

Hospital de Santiago:
Situación y construcción: Se encuentra al fondo de una calle corta al lado de la “Plaza Grande”. Su construcción  comienza en 1437 promovido por D. Lorenzo Suárez de Figueroa, primer conde de Zafra que lo destinó en un principio a servir como casa solariega de la familia de los Suarez de Figueroa antes de construir el Alcázar. En 1446 el conde fundó el hospital “para servicio de Dios y acogimiento de los pobres”. En un principio se conoció como Hospital de la Salutación. Aunque su finalidad era terapéutica, también acogía a pobres sin recursos.
Destaca en este edificio su fachada (que se podría fechar sobre el año 1500), que es una bella y artística portada en piedra labrada, aunque la mayoría del edificio está realizado en ladrillo dentro de la tradición mudejar de Zafra, con un estilo gótico florido. La entrada se abre en un arco rebajado que está dentro de un marco con una muy rica ornamentación de tallos en forma de lacería. La enmarcan dos pináculos adosados que llegan hasta la cornisa superior. Sobre la puerta hay un hueco en forma de arco conupial, en cuyo fondo se pintó un fresco de la “Anunciación” de estilo renacentista italiano, que aún se encuentra en buen estado a pesar de estar a la intemperie.

Portada del Hospital de Santiago


Iglesia de la Candelaria, también conocida como Colegiata:
Situación y construcción: Se encuentra muy cercana a un extremo de la plaza grande. A partir de la reconquista de la ciudad por Fernando III se alzaba la vieja parroquia que, como no era muy sólida, a primera mitad del Siglo XVI amenazaba ruina, y fue reconstruida desde 1544 bajo las órdenes del tercer conde de feria, Lorenzo Suarez de Figueroa. En 1546 ya estaban cubiertas algunas naves, y en ella ya se podían celebrar los oficios. Según la opinión de estudiosos de este edificio, la intención de este edificio era gótica. Un gótico tardío para su época puesto que cuando se estaban haciendo sus arcos ojivales, ya no se construía de esa forma.
El muro de esta iglesia solo tiene el simple adorno de un ventanal redondo sobre la portada. Este acceso se decora monumentalmente con dos cuerpos de columnas pareadas en mármol blanco, coronadas con un sencillo entablamiento y un frontón partido. Sobre él otro cuerpo de parecido formato y más reducido en tamaño, con una hornacina central que alberga una estatua de la Virgen, teniendo a sus lados otras dos estatuas que representan a San Pedro y a San Pablo. La puerta es de madera con remaches y adornos metálicos. La obra de la portada está fechada en 1701. Corona la iglesia una torre que se levanta con dos cuerpos de campanas y está realizada en ladrillo. La torre tiene cuatro ventanales por cada lado, adornados con columnas adosadas. En el interior de los ventanales hay campanas y la torre está rematada por relojes.

Portada de la Iglesia de la Candelaria


Comparo:

Aunque las dos son similares porque su carácter es gótico, la portada del hospital remarca más este estilo en mi opinión, ya que como antes se mencionó la portada de la iglesia se acabó en un siglo donde el estilo gótico ya no se utilizaba. Esto se refleja en que por ejemplo, las columnas ornamentales de la portada del hospital, así como la gran cantidad de adornos que enmarcan la entrada, son puramente góticos, mientras que la portada de la iglesia de la Candelaria es mucho más sobria con sus columnas lisas de mármol y un simple adorno de su ventanal redondo.

Personalmente prefiero la del Hospital, ya que está mucho más integrada con el edificio y me resulta más bonita, mientras que la de la Iglesia de la Candelaria se nota que es un añadido muy posterior a la construcción en sí. También prefiero el fresco de la “Anunciación” de la fachada del Hospital que las estatuas de la Virgen, San Pedro y San Pablo sobre la entrada de la iglesia.

Entiendo que hay diferencias entre ambas fachadas debido a su fecha de construcción, y de ahí que se aprecien las diferencias que he remarcado antes en cuanto a estilo, materiales y apariencia.


Cabe destacar que para haberse construido hace ya muchos años están bastante bien conservadas.

Hospital de Santiago

Iglesia de la Candelaria