martes, 18 de marzo de 2014

Arquitectura Popular Extremeña. La casa.

Al referirnos a la casa extremeña popular, debemos tener en cuenta que hay que distinguir las viviendas provisionales extremeñas: chozos o bujardas que hemos trabajado con anterioridad y casas propiamente dichas. 

También hay que distinguir los distintos tipos de construcciones en función de su localización geográfica (no es igual una vivienda del valle de las Hurdes, que de la Siberia Extremeña o de Tierra de Barros. Aunque guarden algunas similitudes son diferentes en cuanto al plano de la vivienda o los materiales empleados). Por último, debemos distinguir las casas en función de la posición económica de las familias que las habitaban (Las enormes casas señoriales propias de Zafra o de Jerez de los Caballeros,…, poco tenían que ver con las casas de la mayor parte de la población.



En la zona de Barros había varios tres tipos de viviendas, en función de la capacidad económica de sus habitantes: El modelo más simple lo muestra la casa de bracero agrícola. Consta de una sola planta, sin sobrado, dividida internamente en dos crujías, como siempre paralelas a la fachada, y con un paso central, ancho, cuyo espacio en la primera crujía sirve de zaguán. A los lados del paso se disponen la sala y las alcobas, comunicándose las de la segunda crujía con las de la primera, y no con la cocina. 

El segundo modelo, la casa del labrador, Suele llevar cuatro crujías y paso central. Los laterales de las dos primeras crujías se dedican a sala y alcobas. Sobre esta parte va el doblado. Las otras dos crujías sin subdivisiones. La tercera es una sala y de ella parte la escalera del doblado y la cuarta se dedica a cocina. Detrás el corral, el tinaón o cobertizo y las cuadras. 

El tercer modelo pertenece a las clases más elevadas, generalmente terratenientes. Es una casa de enormes proporciones comparada con las anteriores. Lleva igualmente varias crujías y paso central compartimentado en zaguán, estancia, cocina y paso propiamente dicho. Toda la vivienda se cubre con bóvedas de ladrillo. El doblado tiene una gran importancia, suele ser muy elevado y muestra unos grandes arcos de medio punto sobre los muros de carga para sostener la techumbre de la casa. El corral es, también, otro espacio económico, pues en él aparecen las cuadras, los cobertizos, la bodega de vino, el lagar, etc. Precediendo al corral, y junto a la casa, está el patio cerrado por un murete de celosía de ladrillo. Externamente, este modelo de casa se destaca por su mayor volumen y por la utilización de materiales más costosos o por la introducción de motivos decorativos.

UTILIDAD DE LA VIVIENDA:

Para hablar de arquitectura de interior, antes tenemos que hablar de los modos de vida que en la casa se llevaban. Esta tenía una doble función, para vivienda y como centro de trabajo. Se tenía que dar cobijo a la familia, a los animales, a los aperos de labor y al almacenaje del grano, es decir, la convivencia era mutua y todo esto sin pensar en normas higiénicas y de salud. Los animales más frecuentes eran: burros, mulos y caballos que ejercían tareas de tiro para la preparación de la tierra y acarreo de la cosecha. Como animal para la alimentación: el cerdo, apreciado por su rentabilidad, ya que con la matanza se conseguían productos de consumo inmediato, a corto, medio y largo plazo, obteniéndose parte del alimento necesario para las familias.

ESTRUCTURA Y MATERIALES DE CONSTRUCCIÓN:

Estructuralmente, todas las viviendas se subdividen en varios muros de carga, siempre paralelos a la fachada, que las distribuyen en crujías o naves: su número dependerá de la situación socioeconómica de la familia. Un corredor o paso, central o lateral, siempre perpendicular a la fachada y a las crujías, corta los muros de carga y se convierte en el eje de distribución de la casa. A sus lados se disponen las diferentes estancias y funciones de la misma. El paso a veces se encontraba empedrado con cantos rodados porque en las casas que no tenían puerta falsa de acceso a la cuadra o al corral  los animales tenían que pasar por el paso y  el zaguán y con las piedras no resbalaban. Tratándose de muros interiores lo normal en la planta baja es la utilización de mampostería, siendo de casi un metro de espesor, ya que tenían que aguantar todo el peso de la casa.
A medida que ascendemos los muros se estrechan, ganan altura y aligeran peso, para ello empleaban el adobe y el ladrillo. La casa, al ser individualizada las cargas se ejercían sobre las paredes linderas y maestra central, de esta manera se evitaba más de un conflicto vecinal. Además con la utilización de la roca madre, el granito, los cantos, la pizarra, la madera, la cal y la arena construían las llamadas viviendas bioclimáticas (tan de moda hoy) todos ellos materiales nobles y naturales. Muros gruesos y ventanas pequeñas evitaban la entrada de calor y frío, mantenían la temperatura ideal en cada estación, y lo más importante, dejaban respirar a la vivienda.
La fachada estaba enlucida y las ventanas enrejadas, con dinteles en ladrillo o granito. Algunas ventanas tenían tejadillos con techo de teja y algunas fachadas tenían un zócalo de proyectado de cemento o de azulejo. Este zócalo alto se extendía en muchas casas al paso y a los patios, con clara influencia andaluza en su decoración.
Fachada.

DISTRIBUCIÓN:

La distribución más común se hacía en dos alturas. La planta baja se destinaba al aposento familiar, recogida de animales y aperos, la segunda, utilizada para el desarrollo diario culinario, de reunión y almacenamiento de productos agrícolas.
Distribución.

SUELOS:
Suelos de peña madre para el zaguán, el pasillo y la bodega, en este caso se le hacían unas estrías, de esta manera evitaban caídas a los animales y a los moradores. Lajas de pizarra para la cocina, lanchas de granito para las escaleras y zaguán, ladrillo para arcadas, bóvedas y cuartos, cal y arena para alcobas y excepcionalmente baldosas para salas. Empedrado de guijarros o cantos rodados para el paso, el corral y la cuadra.
Suelo empedrado.

Suelo de lajas de pizarra.

BÓVEDAS Y TECHUMBRES:

El espacio que queda entre los muros es cubierto por la bóveda, para ello el zaguán, la sala y la alcoba se cubrían de arista, produciéndose ésta por el cruce perpendicular de dos de cañón. La de cañón, es originada por el desplazamiento de un arco de medio punto a lo largo de un eje longitudinal, ésta era empleada en cuadras. Para el pasillo, la escalera y la bodega la de medio cañón. Estos tipos de bóvedas eran utilizadas en la planta baja, correspondiendo la parte delantera al cuerpo de casa y la trasera a la ganadera.
La planta alta se cubría con entramado de chilla, cañizo o jara, de esta manera la techumbre estaba inclinada, y podía ser a una o dos aguas, perteneciendo el paño delantero a la cocina y cuartos y el trasero a las trojes y el pajar.
Bóveda de arista.

ESTANCIAS:
Las estancias principales de las viviendas eran:
El zaguán, por lo general, cuadrado. En las paredes se hacían algunos huecos donde se colocaban los cántaros y tinajas para almacenar el agua, a otros huecos se les colocaba a veces unas cristaleras y servían de alacenas, bien para guardar enseres o loza decorativa, estas podían ser de uno, dos y hasta tres cuerpos. En ocasiones cuando la casa no disponía de pozo se colocaba el llamado “baño”, el cual hacía de depósito de agua para la limpieza. Como pieza de dormir, tenemos la alcoba o cuarto, situado en el interior y sin ventilación a la exterior, tan sólo la luz y aire que recibe de la calle a través del zaguán. Como lugar de estar o “respeto” por ser destinada a recibir las visitas y en ocasiones como dormitorio, tenemos la sala, casi siempre con ventana al exterior. El pasillo recorre el espacio entre el zaguán y el corral, además hace de comunicador entre los moradores y la actividad laboral. La bodega, que siendo anexo de la cocina no se sitúa junta a ella, está ubicada en la planta baja, normalmente la encontramos en el pasillo y sin ventilación exterior. En su interior se guardaba la chacina, el aceite, el vino y otros alimentos que tenían que estar en lugar fresco y seco, sobre todo en verano. Para la obtención de aceite algunas casas tenían lagareta, de forma cuadrada, alargada o redondeada y dispuesta sobre la roca madre o de obra. El corral no puede faltar como elemento imprescindible en una sociedad rural, ya que sus moradores serían poseedores de animales de labor y de sustento. Las medidas del mismo varían según el espacio, ya que albergaba la cuadra, zahúrda, pajar, pozo, portales y podía o no tener “puerta falsa”, en el caso de tenerla, las bestias no tenían que entrar a través del zaguán. El corral además cumplía la función de servicio sanitario. 
La cuadra podía estar dentro del “cuerpo de casa” o en el corral. La entrada a la misma se hace desde la casa a través del zaguán y el pasillo o a través de la puerta falsa. Alargada y no muy ancha, con pesebres embutidos en el muro. El agua necesaria para los quehaceres diarios de limpieza y abastecimiento animal procedía del pozo, elemento necesario pero no imprescindible, ya que muchas casas no disponían del mismo. Se localizaba en el corral, en el patio o en el zaguán, procediendo el líquido preciado de manantiales o de lluvia, más conocido como de “canalones”. De uso polivalente estaba la cocina-hogar, de proporción similar al zaguán ya que se sitúa justo encina de éste, es el centro de reunión donde transcurre la mayor parte de la vida cotidiana del núcleo familiar, destinada a la manipulación, preparación y consumición de alimentos. Disponía de una gran chimenea de campana, la misma al ser grande albergaba a toda la familia, evacuaba los humos y servía de secadero de ciertas piezas de la matanza. Los llamados cuartos situados al lado de la cocina, éstos tenían la función de dormitorios, salas o de desahogo, normalmente con ventilación al exterior. Las trojes, lugar amplio y dividido en varias porciones con separación de unas “paredillas” y divididas entre si, en las mismas se almacenaba la cebada, el trigo, el centeno y las legumbres obtenidas en la cosecha. Estaban situadas en la parte trasera de la planta alta, para aislarlas de la humedad. En unos de los laterales del corral se disponía la zahúrda o “zajurda” de proporciones pequeñas, dividida en dos partes, una tapada para resguardo y otra descubierta, se colocaba una pila donde se le echaba agua y el pienso a los cerdos. Durante el invierno los animales se alimentaban con la paja obtenida en la cosecha, la misma se almacenaba en el pajar, a él se accedía por unas escaleras desde el corral.
Cuadra.

Zaguán.

Otro zaguán.
Trojes.


BIBLIOGRAFÍA:

- RUBIO MASA, J.C.: Arquitectura Popular Extremeña. Extremadura, 1985.

-DE LA CRUZ SOLIS, A.: Historia de la Arquitectura en Extremadura.  Sevilla, 1998.

jueves, 13 de marzo de 2014

Puerta de Jerez

En esta semana visité el Arco de Jerez, en Zafra, mi pueblo.

Según he podido informarme en algunos libros, pertenecía a las murallas que rodeaban a Zafra y que fueron reformadas a partir del año 1428 por Don Gómez Suárez de Figueroa, y esta reforma finalizó en 1442, como figura en una inscripción que hay en la misma muralla junto a la puerta de Sevilla. Su nombre se debe a que esta era la puerta por donde se salía en dirección a Jerez de los Caballeros. En realidad el arco es de construcción reciente (Siglo XVII), porque la puerta antigua estaba en el torreón que hay al lado del mismo, y ha sufrido muchas remodelaciones, incluso en el Siglo pasado.

Su aspecto a principios del Siglo XX.

Aspecto en la actualidad.


Callejeé por Zafra desde la llamada “Plaza Chica”, bajando por una calle estrecha y empedrada, la Calle de Tetuán. Pude observar una callejita muy estrecha y cerrada que se llama “Callejita del Clavel”, y llegué al arco.

En realidad se trata de un triple arco algo apuntado, de mampostería encalada en la parte más cercana, de piedra en las dos más alejadas. En su interior, se encierra una capilla cuya titular es la Virgen de la Caridad, pero en realidad se la conoce como la capilla de Nuestro Señor de la Humildad y de la Paciencia.

Viéndolo desde dentro, desde el interior de los muros, se aprecian dos ventanas que dan idea de que dentro hay una construcción, la capilla. Por la cara de fuera pude ver un balcón central a cuyos lados hay dos figuras, que son el patrón del gremio de los zapateros y el “pie castellano”, que es una unidad de medida. El arco está rematado en una espadaña, con una doble ventana en el primer nivel y una campana en la ventana de la parte alta.


El entorno es muy bonito y cuando he estado en otras ocasiones en los balcones de la zona suele haber muchas flores y plantas, dándole un toque bonito a los alrededores del arco. Además se aprecia que el valor monumental de todo el entorno (Plaza “Chica”, Plaza Grande, Iglesia de la Candelaria, etc.) es considerable. Es una de las zonas de Zafra que más me gustan.

Yo en medio del arco de Jerez.

miércoles, 12 de marzo de 2014

Bujarda

He estado buscando información sobre la localización de bujardas en las proximidades de Zafra. Pregunté a los habitantes de la localidad y estos me comentaron donde podría encontrar varias, aunque yo me decidí por una en especial localizada cerca de la Ermita de la Virgen de Belén.

Según he investigado, las bujardas son uno de los modelos más singulares de la arquitectura tradicional de Extremadura. Son un excelente ejemplo de adaptación arquitectónica al medio natural y en el que no desentona ni por la escala ni por los materiales de construcción que fueron extraídos directamente del lugar sufriendo pocas transformaciones para formar parte de la obra.

Las bujardas son todos aquellos espacios de habitación permanente o temporal de pastores y campesinos que reúnen las mínimas condiciones de habitabilidad. Unas construcciones de un alto sentido utilitario, exentas de ornamentación y donde los materiales y su sistema de construcción marcan el carácter y definen la forma.

Esos chozos dan respuesta a un bajo coste a las necesidades de proporcionar una habitación temporal o permanente. Utilizado como albergue, refugio, almacén o establo.

Habría tres tipos de bujardas tradicionales y unas más modernas:


-CHOZOS DE ESCOBERAS: Están hechos íntegramente de materia vegetal. Su planta es circular y se levantan formando una estructura cónica con varas y rollizos de madera, cubriéndose luego con ramajes u otros materiales vegetales que son cosidos al amazón (escoberas, eneas, juncos).

-CHOZO DE ESCOBERA Y PIEDRA: Son chozos de planta circular con paredes de piedra y cubierta vegetal de forma cónica realizada con rodillas de madera y bálago de centeno o ramajes diversos como escoberas, juncos y helechos, sostenido acaso por un poste central. También denominados chozos "de horma". Sus muros construidos por la técnica de la piedra seca sin aglomerante para trabarlas.

-CHOZOS CONSTRUIDOS INTEGRAMENTE EN PIEDRA GRANITICA O PIZARROSA, que presentan planta circular y cuyas paredes se van cerrando y forman una falsa cúpula por el procedimiento de aproximación de hiladas del mismo material que los muros.

-TIPOLOGÍA DE CHOZOS MAS MODERNA: tienen una planta oval y paredes de piedra adobe o ladrillo. La cubierta se realiza con un armazón de palos y en algunos casos se coloca encima una gruesa capa de barro para asegurar una mayor impermeabilidad de la cubierta.


Tipos de Bujardas/Chozos.


Tras informarme, me decidí a buscar aquella bujarda de la que me habían hablado. Me desperté rápido esa mañana, y fui con mi familia en coche hasta la Virgen de Belén.

La bujarda no se encontraba justo allí, sino que continuamos andando a pie siguiendo una pared de piedra que era la cerca de la finca de una casa abandonada. Unos trescientos o cuatrocientos metros por encima de la ermita y cerca de unos montículos de rocas se encontraba la bujarda, la cual parecía bastante deteriorada, especialmente descuidada en el interior.



Yo junto a la bujarda del Castellar.

Pude apreciar que esta bujarda pertenecía a las del tercer grupo y estaba construída enteramente en piedra, unida con argamasa. En su parte superios se apreciaba la "falsa cúpula" que se hacía aproximando las hileras de piedras del techo cada vez más hasta dejar solo un pequeño espacio para una chimenea.

La falsa cúpula y su "chimenea"

El interior estaba muy descuidado.

Para concluir con mi vivencia, me gustaría añadir que me parece una pena que muchos ejemplos como este del patrimonio histórico de Extremadura no se conserven en buen estado, aunque hay otros muchos que han sido restaurados y se encuentran en muy buenas condiciones.
Aún así, visitar esta bujarda fue una buena experiencia para conocer otro aspecto de como podría ser la vida de los agricultores y ganaderos que las construyeron y utilizaron.

lunes, 10 de marzo de 2014

Escudo de los Suárez de Figueroa

La Casa de Feria:

Es una casa nobiliaria española originaria de la Corona de Castilla, cuyo nombre proviene del Señorío de Feria, luego Condado de Feria y después Ducado de Feria. Es la más importante familia nobiliaria que se estableció en el sur de Extremadura en el medievo, tanto por las dimensiones que alcanzará su estado señorial como por el protagonismo de sus titulares en la historia de Extremadura y de España

Muertos el III y IV Duques, debido a la agnación rigurosa del título, éste recae en el abuelo materno del IV duque, Alonso Fernández de Córdoba-Figueroa, el Mudo, V Marqués de Priego (1635-1645), que sería el V Duque de Feria (y V Marqués de Villalba a la muerte de su nieta en 1641) y se haría llamar Marqués-Duque. Con ello se divide el linaje de los Suárez de Figueroa. Zafra deja ser la cabecera de un estado para convertirse en segunda capital de otro.

El escudo:

El linaje Figueroa procede de Galicia y su escudo, con cinco hojas de higuera, parece tener su origen en una proeza contra los musulmanes relacionada con el rescate de unas doncellas, que les iban a ser entregadas en virtud del Tributo de las Cien Doncellas (entre el año 783 y 788), rescate llevado a cabo por un tal Fernando Fernández en un campo de higueras. A comienzos del siglo XIII algunos caballeros del linaje buscaron fortuna en Extremadura en las luchas de la Reconquista.

El escudo con las hojas de higuera.


La apuesta política de los Feria por una lealtad a la corona les permitió crear un estado nobiliario en el sur de Extremadura engrandecido posteriormente gracias a los sucesivos favores regios, que pagaban así los servicios a una Corona inmersa casi de continuo en graves peligros.

Los Condes de Feria se consideraron siempre insuficientemente recompensados por los Reyes Católicos. Los Duques llegaron a tener el tercer estado nobiliario en Extremadura, tras el Duque de Béjar y el Duque de Alba, pero quizás el más adinerado.

Escudo en la entrada del Parador.

Escudo a la entrada de Santa Clara.

lunes, 3 de marzo de 2014

Casa de Aníbal González

Aníbal González Álvarez-Ossorio nació en Sevilla el 10 de junio de 1876 y falleció  en Sevilla el 31 de mayo de 1929. Fue un arquitecto español, principal referente del regionalismo andaluz de principios del siglo XX.

En 1920 sufrió un atentado del que salió ileso, en el que le disparan dos tiros que con suerte no llegan a acertarle.

Fue designado Comisario y arquitecto en jefe de las obras de la Exposición Iberoamericana de Sevilla de 1929, aunque dimitió en 1926. Se inspiró en diferentes estilos, los cuales pudo incluso combinar, tratando de usar materiales tradicionales, aportando siempre un toque personal y sevillano a todos sus edificios. Proyectó numerosos edificios revestidos de gran vistosidad, siguiendo distintos los estilos arquitectónicos que se iban sucediendo o coexistían durante su época. Entre ellos destacan algunos grandes edificios de tipo neorenacentistas, otros de tipo neomudéjar o algunos otros de estilo modernista.

Foto de Aníbal González

Pero entre todos ellos destaca su gran obra emblemática, de estilo ecléctico, donde combina con maestría distintas tipologías históricas aderezadas con un toque muy personal, como es su gran Plaza de España, en el interior del Parque de María Luisa.
En sus construcciones se inspiró en diferentes estilos, fue un arquitecto cosmopolita, probablemente enamorado de la arquitectura renacentista italiana. Supo combinar sus conocimientos y siempre aportó un toque personal y sevillano a todos sus edificios. Era consciente de que sus construcciones debían ser esencialmente regionalistas, utilizó materiales tradicionales adaptados a su época, como el ladrillo, y todo el repertorio puramente sevillano, yeserías, hierro forjado y azulejos.

El primer estilo arquitectónico adoptado por Aníbal González, fue el del modernismo por la fuerza de las influencias vanguardistas procedentes de Europa y Cataluña. Su adscripción al movimiento modernista le llevó a levantar diferentes edificios de este estilo en la ciudad de Sevilla.

Sus obras más destacadas de esta etapa fueron el desaparecido Café de París, las casas para Laureano Montoto en la calle Alfonso XII y la subcentral eléctrica de la calle Feria. Los arquitectos conservadores sevillanos criticaban el modernismo porque cuestionaba los cánones clásicos y la tradición. Además, Aníbal González evolucionó más adelante y sentó sus bases sobre el regionalismo para aprovechar los materiales más próximos de los que disponía, y tal vez inventar así un modo distinto de construcción, siendo considerado uno de los artífices del regionalismo andaluz. El arquitecto adopta unas líneas próximas al neomudéjar, que se muestra en las reformas del Palacio de Monsalves y el actual Museo de Artes y Costumbres Populares, en casi todas estas edificaciones destaca el uso abundante constructivo del ladrillo, que perdurará a lo largo de toda su vida. Cabe destacar que también realizó obras de estilo neogótico como el Museo Arqueológico Provincial.

Cuando murió en 1929, a los 52 años de edad, estaba en la ruina, de manera que hubo que recaudar dinero para conseguir una casa para la familia. Está enterrado en el cementerio de San Fernando de la capital hispalense. El panteón, de diseño del arquitecto, es famoso por tener en su interior una copia del Cachorro.

Estatua en su honor. (Sevilla)


-LA CASA DE ANÍBAL GONZÁLEZ EN ZAFRA-

Se encuentra en la calle Gobernador Nº 9, lindando con el Casino. Se accede por la Calle Santa Ana y/o la propia Calle Gobernador. Actualmente se la conoce como la vivienda de la familia Ramirez Salas, y su uso es como el hogar de dicha familia.
Se construyó en 1931, y su estado de conservación se calificaría como bueno. Está distribuída en tres huecos enmarcada por encintados de ladrillo aplantillado y azulejos sevillanos. La planta baja es muy plana y tiene rejas enrasadas en las ventanas.
En la primera planta las ventanas llevan rejas voladas y tiene un balcón central, siendo la planta que remata original y novedosa con dos cuerpos unidos e interrumpidos por una balaustrada de cerámica.
Se localiza en una de las calles de Zafra donde mejor se conserva la arquitectura.

Junto a la casa.


-Bibliografía-

TORO FERNÁNDEZ, B.: “Urbanismo y Arquitecturas Aristocráticas y de Renovación Burguesa en Zafra (1850-1940)” Badajoz, 1994.



domingo, 2 de marzo de 2014

Antonio Salazar Fernández

Antonio Salazar Fernández fue investigador de la historia local y cronista de la ciudad de Zafra, en Badajoz. No solo eso, fue el primer cronista de dicha ciudad y además el primero en usar métodos científicos para acercarse al pasado de esta.

Nació en 1893 y falleció en 1957. Era un lector incansable y bibliófilo el cual coleccionó libros hasta formar una estupenda biblioteca que aún se conserva íntegra en el domicilio familiar de la calle Gobernador a modo de exposición.

Retrato de Antonio Salazar.


La exposición “Una mirada a la biblioteca particular de D. Antonio Salazar Fernández”, instalada en la galería alta del Museo, pretende dar una visión de la producción del cronista zafrense, de sus relaciones socioculturales y de su amor ya mencionado por los buenos libros.

Escribió varias obras interesantes como  “El Castillo de El Castellar (datos para la Historia de Zafra)”, que fue publicado en 1955. De este libro se hizo una edición facsímil en el año 2005. También se conoce de toda una serie de artículos que vieron la luz en la Revista de Estudios Extremeños o en la de Zafra y su Feria. Es importante señalar que sus escritos siempre estuvieron animados del rigor, que procuró alejarse de de las fantasías y los datos no contrastados.

Por su labor, el Ayuntamiento de la ciudad tuvo a bien dar su nombre a la Biblioteca Pública Municipal de Zafra.

La Biblioteca Municipal de Zafra se crea en el año 1956 mediante una Orden del Ministerio de Educación Nacional. Culmina así el proceso iniciado por el Ayuntamiento  cuando en sesión plenaria de 24 de abril de 1954 acuerda la creación de una Biblioteca Municipal en la ciudad.

La Biblioteca queda inaugurada el 19 de junio de 1957 en un local de la sociedad “Casino de Zafra”. A lo largo de  los años ha tenido diferentes sedes: dependencias de la Casa Consistorial, instalaciones del Centro de Extensión Cultural y “Colegio Público Manuel Marín”. Finalmente se traslada en 1988 a la sede que ocupa actualmente, el edificio de la Lonja de contratación, construido en la década  de los años sesenta.

Biblioteca municipal de Zafra vista desde lejos.

Desde 1981 la Biblioteca Municipal lleva el nombre de este importante cronista de la historia de Zafra, Antonio Salazar Fernández.

-Bibliografía-


*SALAZAR FERNÁNDEZ, A.: “El Castillo de El Castellar (datos para la Historia de Zafra)”. Badajoz, 2005.

sábado, 1 de marzo de 2014

Manuel Díaz de Terán Fernández

Don Manuel Díaz de Terán Fernández fue el fundador de la empresa DITER, fundición y posterior fábrica de motores.

Todo comenzó a finales del Siglo XIX, cuando su padre, Don Manuel Díaz de Terán Rodríguez se trasladó desde Sevilla a Zafra  con su familia el día 1 de Febrero de 1878, montando allí un pequeño negocio para vender madera con 30.000 reales facilitados por Don Constancio Gómez, vecino de Zafra. 

La fábrica estaba establecida en el lugar conocido como Campo de Sevilla. El negocio daba sus frutos, y le añadió además una pequeña fundición de hierro algo deficiente en sus inicios.

En 1903 se compró un trozo de terreno al Ayuntamiento y construyeron una nueva fundición que se convirtió en un taller de motores. Durante estos años realizaron obras como el armazón del Salón Romero, el herraje de la estación de autobuses de Almendralejo, y otras obras menores como prensas de vino, norias, etc.


En 1911, Don Manuel Díaz de Terán Rodríguez, su padre, repartió su capital antes de retirarse. El capital ascendía a 185.266 pesetas (cantidad muy importante para la época). Sus hijos Manuel y Pepe continuaron con la obra de su padre. La empresa Diter pasó de taller a fábrica a principios del Siglo XX. La fundición fue sufriendo sucesivas remodelaciones hasta que se decidió construir una nueva en la zona conocida como Hoyo Lairón. Se ampliaron sus locales y se distribuyeron en dependencias perfectamente trazadas y ordenadas en las que destacaban seis naves de 60x25 metros.

Hacia los años cuarenta existían salas de montaje, talleres mecánicos y de forja, y al lado de la fábroca se localizó en barrio obrero.


Con el tiempo, su empresa comenzó a ganar popularidad y empezaron a fabricar maquinarias de diferentes usos, lo cual les ganó más popularidad gracias a la falta de maquinas tras el golpe de estado del fascismo en España.

Por el año 1940 aproximadamente su empresa, “Diter”, inicia la construcción de su primer motor propio, aunque no es hasta 1949 cuando se consigue el motor con patentes propias. Este motor trajo más años de prosperidad a la empresa, el cual se popularizó rápidamente hasta tal punto de llegar a ser usado de manera internacional.

Gracias a este motor y toda la publicidad extendida gracias al sistema propagandístico del régimen, llegaron a colaborar con la célebre MWM, uno de los principales fabricantes alemanes de motores Diesel, juntándolas para crear unos motores llamados MWM-Diter.

Su empresa, la cual ya exportaba a todos los países del mundo gracias a su “competitivo producto”, lograron ser “líderes de exportación” durante varios años.

Aún así y como toda empresa, la Diter sufrió sus altibajos y sus cambios, unos para bien y otros para mal.
Pero a pesar de todo, Don Manuel Díaz de Terán y su familia supieron llevar sabiamente esta empresa, la cual a día de hoy todavía perdura.

-Galería fotográfica-

Taller de la Diter.

Otra foto de Taller.

La familia Díaz de Terán.

Cartel de la Diter.

Ejemplar de una Noria fabricada por la Diter.

Llavero de la familia Terán.

Opinión de la prensa de la época sobre la Diter.